jueves, 8 de mayo de 2014

¿Bendición o Negación?

La verdad llevo mucho tiempo pensando escribir algo sobre esto y no terminaba de darle forma a la idea. La primera vez que me dijeron el diagnóstico de mi hijo lo que se sentí fue alivio, alivio de por fin tener algo con lo que empezar a trabajar, de lo que aprender, un punto de partida para empezar a tirar para adelante. Seguramente no todos lo tomaremos de la misma manera, pero en mi caso era mucho peor no saber que pasaba.
Después también me toco vivir el duelo, la aceptación, la bronca, la tristeza, la incertidumbre, etc. Pero más difícil que todo esto fue y sigue siendo entender y respetar al que te dice "tener un hijo especial es una bendición". Empiezo diciendo que para mi todo hijo deseado es maravilloso (no me gusta la palabra bendición por las connotaciones religiosas que implica), pero de ahí a decirte que el trastorno de tu hijo es una bendición hay mucha diferencia. Y no hablo desde la intención de negar la problemática de Matias, de ninguna manera, yo a las dificultades de mi hijo las acepto, las miro de frente y las encaro con toda la fuerza de voluntad de la que soy capaz. Pero si pudiera elegir "sacarle" el TGD no dudaría ni un segundo en hacerlo. No quiere decir que no lo acepte como es, no quiere decir que no lo ame con toda mi alma tal cual es, pero no considero bajo ningún punto de vista que el trastorno de mi hijo sea una bendición, ni que mi hijo haya venido al mundo a enseñarme nada a través de su TGD. Lo que yo creo es que en algún momento de su desarrollo algunas células no hicieron las cosas como debían y por eso Mati no tolera ciertos ruidos, o no puede comunicarse como un niño neurotípico, o se frustra con facilidad por no poder expresar con precisión lo que siente...y créanme que cuando ves a tu hijo pasar por tanto y luchar tanto, que vengan a decirte que todo eso es una bendición de Dios no ayuda. Si tu Dios quiso bendecir así a mi hijo y vos tenés la posibilidad de darle un mensaje de mi parte, decile que le erró feo, y que la próxima vez que quiera repartir dones pase por alto a mi familia. Y si vos estás leyendo esto y conocés a alguien con un hijo o hija con alguna dificultad, antes de decirle algo así pensá que quizas podés herir más que ayudar. Gracias.

2 comentarios:

Senta Arellano dijo...

amiga mia, la bendición no es que Mati tenga TGD, la bendición es que el tenga una madre como tú, apañadora y realista, y no una tarada que solo se se dedica a reclarmar y autocompadecerse sin caminar hacia adelante con la cabeza en alto como lo haces tu

Alejandra dijo...

Gracias hermosa! Te quiero!